Mi verano 2010 comenzó cuando se acabaron las clases. Me fui de viaje a Suiza con dos de mis amigas, estuvimos allí siete días en los cuales visitamos varios lugares; Las cumbres Europeas, El monte Titlis, El monte Pilatus, fuimos a Berna y vimos el parque de los Osos y el reloj Zytglogge. Cuando volvimos del viaje, el 5 de julio, nos pasamos todo el día durmiendo y al día siguiente empezamos a ir a la playa, y acabamos allí todos los días de esa semana por la tarde. El día 11 empezaron las fiestas del lugar donde vivo, Villarrodis, es algo destacable en mi verano porque esta fuera de la rutina del ir a la playa y luego estar en casa, o ir de paseo, porque de los cinco días que duran las fiestas, vamos todos los días a ellas. El día 14 se acabaron las fiestas. Entonces empezamos a organizar el cumpleaños de una de mis amigas, pero como hasta el día 26 de julio no sería, nos dedicamos a ir a la playa hasta ese día. El día 26 salimos de fiesta, celebrando el cumpleaños de mi amiga, y luego algunos de los que fuimos al cumpleaños nos quedamos a dormir en su casa. A partir de ese día seguimos con la rutina que llevábamos hasta ese día, el de ir a la playa todos los días, a excepción de algún día en el que fuimos a Coruña a dar un paseo o de compras. Y como la rutina nos aburría decidimos hacer un pequeño viaje de tres días por Cantabria, nos alojamos en un albergue cerca de Santander y durante los tres días visitamos El zoológico de Cabárceno, fuimos a Santander y nos dimos un chapuzón en una de las playas. El día 14 de Agosto ya estábamos de vuelta en Villarrodis, ese mismo día fuimos al autocross, nos gusta ir para pasárnoslo bien, ver correr a un amigo y a mi primo sobre todo, pero también nos gustan las carreras en si. Al día siguiente las carreras continuaron por la mañana y esta vez fuimos una amiga, mi padre, mi tío y yo. En mitad de las carreras me llamaron de Protección Civil para alegrarme el día ofreciéndome trabajar de socorrista en una de las playas de arteixo, me alegro mucho ya que estuve todo el verano esperando, porque es un trabajo que me encanta. Estuve trabajando una semana y media en Repibelo donde me enseñaron mucho, y una semana en Sabón donde también aprendí, pero sobre todo conocí a personas que la mayoría de la gente al ser socorrista no te tienen como lo que de verdad haces, piensan que solo estas en la playa tomando el sol, pero no, y yo conocí a gente que lo dio todo para no tener que lamentarse mas tarde.
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